
El origen del agua
El Agua Termal de Avène tiene un origen profundo proveniente de precipitaciones muy antiguas. Ahora se sabe que se ha infiltrado en el subsuelo durante más de cuarenta o cincuenta años (mediciones por dosificaciones isotópicas con tritio).
Desde las profundidades de la tierra, el agua migra muy lentamente hacia la superficie al interior de una capa geológica formada de dolomitas y calizas dolomíticas. El agua así se mineraliza y circula por vías ascendentes privilegiadas.

Propriedades terapeuticas del agua termal de Avène
La simple observación de la piel, durante la cura, permite constatar las propiedades del Agua termal de Avène en el tratamiento de las enfermedades de la piel: disminución de la inflamación, atenuación de las irritaciones, aceleración de la cicatrización.
Hoy pueden demostrarse perfectamente los beneficios de una cura con Agua Termal de Avène sobre patologías crónicas o invalidantes tales como la dermatitis atópica, el eczema, la psoriasis, las ictiosis y también sobre las gingivitis y glositis, tanto en el bebé como en el niño, el adulto o el adulto mayor. También puede ayudar en los cuidados después de un cáncer o después de una radioterapia y en los cuidados de las quemaduras. Se han realizado ensayos de investigación dermatológicos para medir objetivamente la eficacia del Agua Termal de Avène sobre las siguientes indicaciones :